Tus hábitos son algo que puedes cultivar. Y te aseguro que ya estás equipado para poder cumplir cualquier expectativa. No hay nada que no puedas conseguir, si tienes una base sólida y con decisión coherente, como dicen los creyentes que seguir a Cristo es de valientes, lo mismo ocurre con la practica de los buenos hábitos: así por ejemplo Levantarse 15 minutos antes de lo habitual para leer libros de auto ayuda, practicar deporte, o simplemente alimentarse con frutas y verduras crudas aunque estés oliendo un suculento bistec de chancho, o quizá hacer ayuno una vez por semana. Muchos verán a ese tipo gordo que es millonario y pensarán: “Pues lo ha conseguido sin tener el hábito de dominar su dieta y su cuerpo”. Lo ha conseguido financieramente, sí, ¿pero a qué precio? A mí me gusta tener...